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Nuestro cliente de Suecia puso recientemente en funcionamiento una unidad de vacío para batir miel y recibió miel cremosa de la más alta calidad.

La unidad de cremado al vacío se utiliza para la cristalización controlada de la miel. En este modelo, el proceso se produce en condiciones de vacío, evitando que la miel se sobrecaliente y conservando su sabor, color y propiedades beneficiosas.

Durante el proceso de cristalización controlada se produce la recristalización (reducción de la proporción de cristales), la cristalización controlada (crecimiento de cristales según un nuevo patrón) y la mejora de la textura y características organolépticas de la miel.

Gracias al proceso de cremado, la miel adquiere una textura delicada y uniforme conservando sus propiedades beneficiosas y su aroma natural.